viernes, 28 de diciembre de 2012

¡Es Nochebuena! Parte II

Salí de la Residencia y me dispuse a ir a buscar a Santa. Iré a la playa, que es donde aún no había buscado.
Bueno, aquí no parece haber nada...


Supongo que probaré a subir al Cabo de los Enamorados (eso sí, ¡después de unos buenos tallarines!):

Tras tomarme unos tallarines calentitos y enterarme de los rumores que había por ahí, decidí subir y... ¡OH, DIOS MÍO! ¡ES SANTA CLAUS!


¡Tengo que hablar con él, ya!

-¿Te has portado bien o mal?
Los niños que se portan bien reciben un regalo del viejo Santa Claus.
Aunque dice que no puede entregar regalos porque ha perdido el mapa de las casas de los niños buenos... oh, no, ¡esto me suena a encargo! Efectivamente, me ha preguntado que si soy de aquí, y me ha pedido... ¡que entregue los regalos por él! Aunque tengo que entregarlos todos antes de que amanezca. También puedo hacerlo la noche de Navidad, aunque, claro, es mejor en Nochebuena.
Me ha entregado un regalo y dice que debo dejárselo a algún niño bueno, pero... ¿cómo se yo si han sido buenos o no?

He dejado el primer regalo en un calcetín navideño sobre el árbol de una casa que he escogido al azar. ¡Pero después me he dado cuenta de que es de Foggy, y que me cae fatal! Bueno, a lo hecho, pecho...


Será mejor que vaya a que Santa me entregue otro regalo... ¡tengo trabajo!


Me quedan 10... informaré cuando me quede uno. ¡Ya está, último entregado!

Gracias a ti he podido entregar los regalos a todos
los niños buenos de esta ciudad.
-¡Eso es! Tengo un regalo muy especial
para ti!
¡Nos veremos el año que viene!
Pero sólo si te vuelves a portar bien...
¡Un cofre del tesoro!
¡Feliz Navidad!

No hay comentarios:

Publicar un comentario