Bueno, aquí no parece haber nada...
Supongo que probaré a subir al Cabo de los Enamorados (eso sí, ¡después de unos buenos tallarines!):
Tras tomarme unos tallarines calentitos y enterarme de los rumores que había por ahí, decidí subir y... ¡OH, DIOS MÍO! ¡ES SANTA CLAUS!
¡Tengo que hablar con él, ya!
-¿Te has portado bien o mal? Los niños que se portan bien reciben un regalo del viejo Santa Claus. |
Me ha entregado un regalo y dice que debo dejárselo a algún niño bueno, pero... ¿cómo se yo si han sido buenos o no?
He dejado el primer regalo en un calcetín navideño sobre el árbol de una casa que he escogido al azar. ¡Pero después me he dado cuenta de que es de Foggy, y que me cae fatal! Bueno, a lo hecho, pecho...
Será mejor que vaya a que Santa me entregue otro regalo... ¡tengo trabajo!
Gracias a ti he podido entregar los regalos a todos los niños buenos de esta ciudad. |
-¡Eso es! Tengo un regalo muy especial para ti! |
¡Nos veremos el año que viene! Pero sólo si te vuelves a portar bien... |
¡Un cofre del tesoro! |